El trajín en la ciudad es arduo. Llegar puntual al trabajo, almorzar con la familia, correr de regreso a la oficina, asistir a una reunión y luego a un coctel, entre otras actividades son parte del cotidiano de las urbes. Por eso es que se crearon prendas con el fin de soportar este afán. De ahí nace el estilo urbano, una invitación a la comodidad y al buen gusto, en este caso, masculino.
El concepto es unir prendas y crear un estilo que vaya a todo lugar y que sea adecuado a toda hora y ocasión, siempre con un toque chic, elegante. La combinación de camisas, camisetas, pantalones y sacos es crucial para marcar esta tendencia. La cotidianidad citadina precisa comodidad pero también estilo, por eso lo urbano es perfecto para un lunes a las 09.00 o para un viernes a las 20.00.
Este estilo ofrece diseños, colores y texturas combinables entre sí, inclusive algunos diseñadores y casas de moda proponen la ropa doble faz, o como se dice en el país, doble cara. Solo es cuestión de ponerle creatividad a tu tenida.
Lo urbano es versátil, casual, semiformal y descontraído, un look que gusta a los hombres modernos. Este estilo se ve en los diseños de Fernando Martínez, bajo la etiqueta de Sondo. “Nos inclinamos por ropa de calle, de ciudad, cosmopolita, que puede funcionar igualmente para ambientes más formales”.
Nelson Martínez, también diseñador de Sondo, promueve las poleras y camisas de algodón, que se caracterizan por la combinación de tonos. “Son oversize y las hay con colas de pato dentro lo sportchic”.
Ese noble material es uno de los preferidos del diseñador boliviano Daniel Rúa, quien ha presentado diferentes colecciones también con el estilo urbano. Él propone en su trabajo tenidas totalmente casuales, donde los estampados y las combinaciones o los contrastes predominan haciendo de cada outfit divertido, llamativo y hasta osado.
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