lunes, 7 de abril de 2014

Jorge Nazra:“Quedarme sin trabajo fue lo mejor que pasó”

Sus libros de autoayuda se venden en sitios en internet. En Bolivia, su obra Sapoverde Tuyú, que cuenta la historia de tres ranas que sueñan con ser cantantes famosas, está en ensayo para su estreno en Santa Cruz, de mano de la compañía Tucura Cunumi. Hace 14 años modelaba y también escribía, un castin lo llevó a España y desde allá, casado, con tres hijos, demostrando que siempre está dispuesto a vencer los prejuicios, Jorge Nazra cuenta cómo vive, apoyando a su esposa, creando y haciéndose cargo de la casa y de tres niños pequeños.

¿Qué has hecho durante estos años?
Los que me perdieron la pista aún me relacionan con el mundo de la moda, pero la verdad es que no tengo ninguna desde hace más de una década. Cuando me trasladé de Madrid a Barcelona en 2001 tuve la oportunidad de poder trabajar en mi profesión. Gracias a una gran amiga, que en esa época era directora de una revista especializada en salud, se me abrió un nuevo horizonte, tanto en el ámbito periodístico como literario. Puedo decir que entre 2001 y 2009 tuve la mejor racha profesional que pude haber imaginado. He escrito para la revista Dietética y Salud durante 12 años; he escrito también para las revistas Woman, Tu Bebé, Comer y Beber.

¿Cómo incursionaste en los libros de autoayuda?
Fui coautor en una serie de autoayuda que tuvo bastante éxito en ventas. Consistía en un conjunto de libros, cada uno especializado en un tema. Sacamos a la luz 100 consejos antiedad, 100 consejos para adelgazar y 100 consejos para una buena memoria. De los tres se hicieron varias ediciones, y los dos primeros fueron traducidos al portugués y al polaco. La última obra que he publicado fue La telaraña del gusano de seda, al hilo de la felicidad, un cuento de autoayuda, o bien un libro de autoayuda con formato de cuento o fábula. Esta obra es quizá la que más me ha llenado en todo este tiempo.

¿En qué momento decidiste quedarte en tu casa a cuidar a tus niños?
En 2008 llegó a nuestras vidas Telmo (5), nuestro primer hijo. Con su llegada ya se escuchaba en los noticiarios y en las calles sobre la crisis que se venía. En vez de alarmarme sentí alivio y en cierto modo agradecimiento, pues todo me venía bien para contrapesar los desafíos que estaba empezando a vivir en casa. Todos los factores en nuestra vida coincidieron, no solo para
que yo ayude con la crianza, sino para que me haga cargo del 80% del cuidado de los niños y de la casa. Quedarme sin trabajo fue lo mejor que nos pudo suceder.

¿A qué se dedica tu esposa?
Debora tiene cuatro carreras, es bailadora profesional de flamenco, fisioterapeuta y kinesióloga holística y monitora de pilates. Firmó un contrato con una de las escuelas de pilates más importantes del mundo y además de ser un centro que ofrece servicios son un centro de formación de profesores. Esta asociación ha requerido una mayor complejidad administrativa en el negocio, por tanto he creado el departamento de comunicación. O sea que otra vez, de manera natural y orgánica, el universo ha conspirado para que Debora y yo estemos juntos y revueltos. Este es el resumen de cómo me quedé sin trabajo casi tres años y lo bien que me vino. Ahora vuelvo a tener mucho trabajo, pero lo que me sigue faltando es tiempo y energía.

¿Y en medio de todo esto aparece Sapoverde tuyú?
Desde que salí de Bolivia he tenido el honor de que la Compañía Artística Tucura Cunumi represente obras teatrales de mi autoría, bajo la dirección y producción de mi socia y gran amiga Yovinca Arredondo. Este año presentaremos Sapoverde tuyú, una obra ideal para verla en familia, ya que invita a una reflexión sobre las relaciones familiares y la importancia de mantener la unidad y la armonía

¿Qué planes tenés a futuro?
Además de trabajar con mi esposa, quiero volver a escribir, de preferencia dedicarme más a la narrativa. Tengo tres proyectos bien pensados y desarrollados y me gustaría empezar a escribirlos a finales de este año. Hasta aquí llega mi futuro, no puedo ver más allá

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